Los cien días.

Hace cien días, cuando fueron nombrados  los nuevos ministros, los ciudadanos con menos ingresos (que somos la mayoría) teníamos la esperanza de  un cambio para bien en nuestra calidad de vida.

El nuevo gobierno no se cansaba de decir aquello de que pagarán mas las rentas mas altas, pero la realidad es otra, ese derroche de gasto público con el que nos amenazan, me temo que lo pagaremos los de siempre.

Para empezar ha aumentado el paro, los sueldos siguen por los suelos, la famosa reforma laboral quedó en el olvido, y el nuevo gobierno tiene que gobernar a golpe de globos sonda y marcha atrás, dependiendo para todo de la mayoría de grupos políticos, incluidos radicales e independentistas.

A los jubilados nos han incrementado la pensión un 1,60 %  !que barbaridad diez o doce euros al mes! después de diez años de subidas pírricas.

Pero tranquilos,  que hoy nos despertamos con la alegría de una nueva subida de la luz, nos dicen que ha subido un 45% en un año, el gas un 5%  y por si no fuera suficiente nos anuncian una subida del combustible diésel, (dicen las malas lenguas que será para pagar el próximo derroche), sin pararse a pensar que la mayoría de los trabajadores y jubilados que aun  mantenemos un coche (aunque tenga muchos años) funciona con carburante diésel. También los pequeños comerciantes utilizan sus furgonetas con carburante diésel, lo que supondrá un aumento de precio en los productos de consumo.